viernes, 25 de enero de 2008



EL CRISTIANO Y SU LIBERACION

En el libro de Exodo 3:7-8, nos menciona que Dios se comprometió a realizar cuatro cosas a favor de Israel.
Liberarlos de la esclavitud egipcia.
De guiarlos, de conducirlos por el desierto.
De sustentarlos, de alimentarlos en el desierto.
De introducirlos a una tierra mejor de la que habían salido.
UNA LIBERACION LOCAL Y LITERAL (Exodo 12:40-41)
MOISES ES LLAMADO A LIBERAR A SU PUEBLO (Exodo 3)
Los primeros capítulos del libro del Exodo nos hablan de la esclavitud física y emocional a la cual estaba sometida la nación hebrea, Ex. 1:8-14. Por Exodo 12:40-41, sabemos que los israelitas pasaron dentro de Egipto unos 430 años. Sus problemas empezaron cuando se levantó un faraón que no conocía a José.
Para sus propósitos Dios escoge a un instrumento humano llamado Moisés para liberar a su pueblo, Exodo 3. El nacimiento de Moisés estuvo marcado por varios acontecimientos importantes.
Nació bajo un faraón que procuraba su muerte, Exodo 1:15-22.
Nació rodeado de dolor y de muerte por el duelo de centenares de familias que perdieron a sus hijos varones por causa del decreto de faraón.
Por providencia divina es preservado con vida al ser protegido por la misma hija del faraón, Ex. 2:1-10. Es decir, Dios lo introduce en el mismo seno de sus enemigos.
MOISES HUYE AL DESIERTO PARA SALVAR SU VIDA (Exodo 2:11)
A la edad de 40 años se identifica con su pueblo lo que le costará su posición en el palacio, y su vida cómoda en el mismo, teniendo que huir de repente al desierto, en donde pasará 40 años como pastor de ovejas, después de los cuales es llamado por el Señor para que regrese a Egipto y libere a sus hermanos.
Moisés obedece a Dios y regresa a Egipto una vez que los que buscaban su vida han muerto, Ex. 4:19, ya no como un hijo adoptivo de Faraón que regresa a buscar un puesto en el palacio, sino como un embajador celestial que procura el bienestar de sus hermanos.
La llegada y el anunciamiento de la liberación es anunciada con poderosas señales y terribles prodigios. Entre estos podemos señalar las plagas de langostas, de ranas, de granizo, de úlceras, de sangre, etc. Exodo 7-12.
C. LA LIBERACION SE REALIZA (Exodo 12-14)
Los capítulos del 12 al 14 del libro de Exodo nos narran los acontecimientos finales de la liberación del pueblo de Dios. Antes de la liberación hubo un sellamiento por medio de la sangre de un cordero que proveyó que los que querían ser liberados salieran esa noche de Egipto, Ex. 12:22-23.
Como acto final de liberación Dios secó el mar rojo para que su pueblo pudiera abandonar a Egipto para siempre. La liberación fue un acto total del poder de Dios, Exodo 14:13-14, 30-31.
UNA LIBERACION UNIVERSAL Y ESPIRITUAL (Gálatas 4:4)
TODOS ESTABAMOS SOMETIDOS A ESCLAVITUD ( Rom. 2-3)
En los capítulos 3 y 4 de Romanos Pablo nos dice que todos estábamos sometidos a esclavitud por causa de nuestros pecados. Todos éramos siervos del viejo faraón, del amo del pecado, Satanás.
Gálatas 4:4, Mateo 1:21, nos hablan del nacimiento de un libertador que nos vendría a liberar no de una esclavitud física y literal como lo fue en el pasado, sino de una liberación espiritual con dimensiones universales, Juan 3:16. El nos libraría de nuestros pecados, de la condenación de la ley. El pagaría la deuda.
Si bien es cierto que vivimos en un mundo de mucha injusticia social Dios por medio de Jesús nos desea liberar primordialmente de nuestros pecados. El producirá cambios verdaderos en las estructuras políticas en su Segunda Venida a la tierra.
EL NACIMIENTO DE NUESTRO LIBERTADOR (Mateo 2)
Nuestro libertador nace en condiciones muy parecidas a las que rodearon el nacimiento de Moisés.
Nace bajo el reinado de un rey que procuraba su muerte, Mateo 2:16.
Nace rodeado de dolor, de muerte y de luto por las familias que habían perdido a sus hijos varones menores de dos años, Mateo 2:1-18.
Por providencia es preservada su vida al ser enviados ángeles que le dicen a su madre y a José que huyan a Egipto, Mateo 2:13-15.
Al igual que Moisés regresa a su tierra natal una vez que los que buscaban su vida han muerto, Mateo 2:20.
JESUS DA COMIENZO A SU OBRA LIBERTADORA (Mateo 4)
Después que Jesús es bautizado, pasa 40 días y 40 noches en la quietud del desierto, para luego venir a dar comienzo a su obra de liberación a favor de sus hermanos. Dicha liberación será señalada por medio de grandes y poderosas señales y sorprendentes milagros.
Nuestra liberación sería lograda al igual que se logró la del pueblo judío de manos de los egipcios. Así como se produjo la muerte de un cordero aquella noche, de la misma manera y a diferencia de lo que sucedió en las casas de aquellos que no mancharon sus puertas con sangre, el llanto y el dolor se sintió en la casa de nuestro Padre celestial al entregar a su primogénito a favor de nosotros.
Es así como se logró nuestra liberación. Allí en la cruz se derrotó para siempre el ejército del viejo faraón. En la cruz se abrió un ancho mar en donde podemos lavar nuestros pecados.
Cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador entonces somos verdaderamente libres, Juan 8:31-36. Es así como Dios ha dado el primer paso de los cuatro que mencionamos en la introducción.
CONCLUSION
El propósito primordial de la liberación es para servir a Dios, Romanos 6:11-23.
geovisit();

No hay comentarios: